El año pasado me gustó mucho esta prueba, no conocía la zona (un pecado para un madrileño) y me pareció una carrera bonita y bien organizada. La quería repetir y de paso intentar rebajar el tiempo que hice (24h37') ya que al no conocerla fui bastante conservador y hubo zonas en donde creo que podía haber ido más rápido.
Ese era mi objetivo
este año y con la motivación extra de que
mi pequeña Claudia estaría esperándome en meta (siempre que no llegase
muy tarde).
Llegamos a
Navacerrada por la mañana, nos instalamos en el hotel al lado de donde se recogían los dorsales y
muy cerca de la salida y tras vaguear un rato en la piscina nos fuimos al
pueblo a comer.
Estresado esperando la hora de la salida. |
Lo peor para mi en
este tipo de carreras es la espera y sobre todo cuando la salida es a última
hora del día. El tiempo pasa muy lento y hasta se me quitan las ganas de
correr.
Por la tarde otro
rato de piscina y a recoger el dorsal en el polideportivo.
Recogiendo el dorsal. |
Mas horas ociosas en
las que no se que hacer y ya sobre las
21h nos vamos al centro que hay que cenar, aunque yo al final decido no comer
nada por si me sienta mal tan cerca de la salida.
Ya hay congregados bastantes corredores junto
a familiares y además en ese momento se está disputando el cross nocturno por
lo que el ambiente es muy bueno. Vuelvo al hotel a cambiarme y con el tiempo
algo justo me despido de mi familia y entro al corralito donde Jorge, un amigo
que conocí en la CostaBlancaTrail compartiendo con él y con otro amigo (Rafa)
casi toda la carrera, me está esperando. Le localizó y nos situamos muy cerca
de los primeros al lado de un primo suyo.
Jorge y yo. |
Que bonicos..... |
El busca hacer un
entrenamiento bueno de cara al UTMB que hará en agosto, yo mejorar el tiempo
del año pasado y con estos objetivos salimos juntos corriendo, atravesando el pueblo ante los ánimos de los muchos
espectadores que están viendo la salida.
Avanzamos con un
ritmo cómodo por carretera y después pista en busca de la primera subida. Yo
sigo en modo "sedentario", sin ganas de correr. Se que se me pasará,
solo es cuestión de que pase el tiempo o mejor dicho unas cuantas horas.
Llegamos a una fuente a los pies de la Maliciosa donde parece ser que es
costumbre tocar una campana, relleno un bidón, la toco y comenzamos a ascender.
Voy toda la subida unos metros detrás de Jorge (esta vez viene entrenado) a
ritmo y muy cómodo. No me está pareciendo nada dura. De vez en cuando miro hacia atrás para ver la bonita hilera de luz con todos los corredores en fila subiendo y casi sin darme cuenta ya estoy arriba. 5' de adelanto con el año pasado.
A punto de salir. Por la izquierda en tercera fila estoy. |
Subiendo La Maliciosa. |
La bajada es algo
complicada al principio con mucha piedra suelta teniendo mis primeros
resbalones, tropezones y torceduras del tobillo derecho. Jorge en las bajadas
me saca mas distancia, uniéndonos en las parte llanas. La noche es algo fresca
y perfecta para correr.
Ahora nos adentramos
en un bosque descendiendo por un sendero con mucha raíz y piedras que bajo
corriendo con mucho cuidado pero a pesar de eso, mas tropezones y una torcedura
que me hace pensar en lo peor aunque al final y tras unos metros de cojera la
cosa no fue a mas.
Llegando a Canto Cochino. Con unos cuantos resbalones/tropezones encima. |
Llegamos al primer
avituallamiento de Canto Cochino, 18’ de
adelanto con el año pasado donde coincido con un corredor que conozco,
Elíseo de Sevilla (Macua), le saludo, le pregunto por Cristina una habitual
compañera de carreras y tras rellenar bidones iniciamos el ascenso a la Pedriza.
La subida es cortita
y la hago bastante bien. La bajada como las anteriores, hay que tener cuidado
con las numerosas piedras y raíces y ya por un terreno mejor iniciamos un nuevo
ascenso a la Hoya de San Blas.
En un lado del camino veo parado a otro
corredor que me suena, Miguel de mi club de adopción "Corriendo por el
Campo", sin pararme le pregunto si está bien y me presento ya que no nos
conocemos personalmente, él me dice que si , que está esperando a alguien y que
Quique (un amigo común que este año viene de apoyo y no a correr) esta en... yo
le entiendo Cercedilla pero imagino que sería Navacerrada.
Llegamos al
avituallamiento, llevo 5 h 30’ de
carrera y como no me apetece aún comer nada le hecho un sobre de Tailwind a uno
de mis bidones, que he leído que va bien para este tipo de carreras.
Toca el Puerto de La Morcuera, siendo curioso de que no recuerdo absolutamente nada de esta subida
que hice el año pasado, ni incluso según voy pasando por los sitios me acuerdo
de algo (ahora ya no creo que se me olvide). Vamos por una ancha pista y
siempre que el terreno es favorable, aunque cuesta, corremos. En esta parte empieza a amanecer y
cada vez voy encontrándome mejor, esa
desgana inicial ha desaparecido estando ya en modo "ultra", ahora me
da igual hacer 10km que 100.
Dejamos la cómoda
pista y empezamos a subir por un ancho sendero con mas desnivel y con unas
vistas muy bonitas a la derecha donde se ve una bruma que tapa las zonas altas.
Esto si lo recuerdo, sé que ya estamos a punto de coronar el puerto. En bajada
vamos paralelos a una carretera un par de kilómetros hasta llegar al albergue
donde está situado un nuevo avituallamiento. Es el km.43 y he tardado 8 horas, 27’ de adelanto con el año pasado.
Repostando en el albergue de la Morcuera. |
Avituallamiento completo y animado. |
Sigo
sin tener hambre, mi última comida fue hace 17 horas y me mantengo solo con
agua, algo de coca cola y el sobre de naranja de Tailwind. Por tomarme algo me
bebo un vaso de caldo calentito que me sienta bastante bien esperando que en Rascafría pueda comer algo de lo que he dejado allí.
Una rápida visita al
baño y salimos. Ahora viene una larga bajada hacia Rascafría por una ancha
pista. Toca correr y adelantar tiempo que seguramente perdamos en la subida a
Peñalara previo paso por el Puerto del Reventón, así que la hacemos
prácticamente toda corriendo y el resto caminando a buen ritmo. Seguimos juntos
, Jorge un par de metros delante tirando, creo que a el le gustaría ir mas
rápido aunque sigue a mi lado como si hubiese una cuerda invisible que le une a
mi.
Llegamos a Rascafría
y han cambiado algo el recorrido, Accedemos a un carril bici dando un rodeo por la derecha en vez de
siguiendo recto por la zona de El Paular. Cruzamos la carretera principal y por
otra, cuesta arriba, entramos al
avituallamiento en la piscina, donde había dejado una mochila con cosas. Km.57,
9h 38’ de carrera y 30’ de adelanto con
el año pasado.
Jorge con sus cosas. |
Me olvidé el peine en el hotel. |
Parece que estamos de pícnic, pero no. |
Aquí viene un
merecido descanso y sentado en la hierba me como tranquilamente medio sandwich con una schweppes de limón que había
dejado en mi bolsa. Estando aquí vemos como empiezan a llegar los corredores
del TP, la prueba de 60 kilómetros.
Tenía pensado
cambiarme y ponerme algo mas de
"verano" pero hace fresquito y en teoría la tarde irá a peor por lo
que opto por seguir con la misma ropa. Me pongo protector solar, me doy
vaselina en cierta parte, cojo una gorra, las gafas de sol, una botella de agua
con gas y tras rellenar bidones (uno de ellos pinchado) salimos hacer la mitad
que nos queda.
Toca andar. Primero
por un cómodo camino y después por una senda con un desnivel muy llevadero.
Jorge va el primero marcando el ritmo, yo le sigo y justo detrás nos acompañan
5 corredores mas. Este tramo es entretenido, los corredores de atrás van
hablando entre ellos y contándose
historias; que si una garrapata en el pito se quita con vaselina, que si esta
carrera es mas dura, que esta otra la tienes que hacer...... La senda da paso a una pista y seguimos la
ascensión, algo cansina.
Por fin el
avituallamiento del reventón donde paramos muy poquito, el tiempo justo de
rellenar bidones y tomar tranquilo un vasito de coca cola. Ya queda poco para
llegar y subir Peñalara, yo reconozco que no voy muy fino y agradezco que esta
parte no sea muy complicada y que haga algo de mal tiempo (bueno para nosotros),
con bastante aire y fresquete. Por fin llegamos a la laguna y pies de Peñalara
donde este año hay algunos neveros que hacen mas bonito el paisaje.
Recuerdo que el año
pasado aquí iba bastante bien pero ahora me noto sin fuerzas y de pensar la
subida que me espera.....
En plena subida a Peñalara. |
Un poquito antes de subir, en la laguna. |
No me lo pienso más e
inicio la subida, sin prisa pero sin pausa…. Un pasito palante..., cojo un ritmito tranquilo y empiezo a trepar por los bloques de granito. Jorge va mejor
y se va alejando (la cuerda invisible por fin se rompió), de lo cuál me alegro
por él.
Poco a poco voy
subiendo manteniendo el tipo. Voy muy tranquilo sabedor de que tengo mucho
tiempo de margen y no quiero desgastarme demasiado y luego pagarlo. La subida
se me hace muuuuy larga hasta que por fin llego al control del final,
cruzándome con Jorge que ya vuelve un poquito antes.
Bueno, ahora la vuelta es casi toda cuesta abajo,
pero sigo sin ir fino. Me sigue costando mucho saltar de piedra en piedra (con
lo cabra loca que soy yo). Aquí agradezco mucho tanto a los voluntarios, como a
los senderistas sus ánimos y muy especialmente a los corredores de la prueba de
60km con los que me cruzo y que al ver mi dorsal de la prueba larga, te cedían
el paso animando con un respeto especial (ellos saben de la dureza de la suya y
se imaginan la de la nuestra).
Las sensaciones no
son muy buenas, aunque sé o intuyo que irán a mejor. Dejo atrás el granito y la
laguna y ya por un terreno mejor y cuesta abajo me dejo llevar casi corriendo.
Llego al cruce donde se empieza a bajar en dirección a La Granja, me paro a
plegar los bastones y justo al lado se detiene un corredor que con un marcado
acento extranjero me dice el cachondo... por 1000 € volverías a subir Peñalara?, el año pasado
si, le digo, pero este no.
Aprovechando la
gravedad (lo de Newton) cuesta abajo me
dejo llevar y empiezo a recuperar las sensaciones. El terreno aquí no es muy bueno
con mucha piedra pero mas o menos se puede avanzar bien trotando. De pronto en
un giro me encuentro al extranjero parado,
mi excusa para descansar.... Le pregunto si está bien deteniéndome a su lado y
de donde es. Alemán y nos ponemos a hablar de fútbol (ese día ya habían
eliminado a Alemania del mundial) y tras una breve charla (tengo que mejorar mi
alemán) emprendo de nuevo la bajada por el bonito bosque de Valsain.
Estoy cansado pero el terreno es tan favorable
que me obligo a correr para adelantar tiempo. Una baliza corro, otra camino,
dos corro una camino y así por un recorrido diferente al del año pasado y sin
tener las mini alucinaciones que tuve alcanzo a un pequeño grupo de corredores.
Bordeamos el muro exterior de la Granja
y ahora si, corriendo por camino y carretera llego al avituallamiento de 5
estrellas***** tan bien atendido por los
Locos del Cerro. Km.85, 16h 27’ de carrera y
58’ de adelanto con el año pasado.
Foto obligada al llegar a la Granja. |
No sé que le asustó. |
Avituallamiento 5 estrellas. |
No me dejaron hacer
nada, un voluntario muy majo y simpático casi me obligó a sentarme, me trajo
una ensalada de pasta, coca-cola, me rellenó los bidones y estuvo atento por si
necesitaba algo más. Muchas gracias por todo.
Mientras descansaba,
pensaba que con la ventaja que llevaba respecto a la edición del 2017 me valía
hacer exactamente lo mismo sin tener que apretar para llegar con ese margen a
meta y con ese pensamiento salí tranquilamente caminando de la Granja. Cruzo
una carretera y por caminos voy en busca del río Eresma para subir pegado a él
por la bonita zona de la boca del Asno.
Sigo con mi
estrategia de correr una baliza y caminar hasta la siguiente ya que no me
siento del todo recuperado y se que me espera la subida del emburriadero, corta
pero muy intensa. De todas formas mi ritmo no es malo y adelanto a un grupito de
corredores y contacto con otros dos haciendo con ellos el resto de esta suave subida
por el río hasta el avituallamiento de la Casa de la Pesca. Km.97, 18h 53’ de
carrera y 1h 23’ de adelanto con el año
pasado.
Aquí paro lo justo
para rellenar bidones y cambiarme un esparadrapo que llevo en la planta del pié
derecho ( el año pasado fue la primera vez que tuve ampollas y este año he probado con ponerme esparadrapo hipoalergénico en la zona problemática , algo que leí por internet, para
evitarlas y os aseguro que funciona).
La foto para Diego casi en el km.100. |
De nuevo en marcha
subiendo por una estrecha carretera asfaltada, tramo que se me hace un poco pesado
hasta que llego al temido por algunos emburriadero, una subida bastante
empinada ( con perdón) no muy larga pero
con algunos metros de fuerte pendiente. Al final me costó menos de lo
que esperaba. Ya arriba, en la Fuente de la Fuenfría, paro un momento a
hacerme una foto que me pidió mi amigo
Diego en el km.100 y sin mas pausa cojo el camino Schmidt que en
unos 6kms., me llevará al Puerto de Navacerrada.
Comienzo con ganas
corriendo en las partes fáciles pero creo que me estoy desgastando bastante y
al ir bien de tiempo prefiero reservarme comenzando a caminar pero con un ritmo
que voy dejando atrás a corredores. Muy larga se me hizo también esta parte
hasta llegar a unos remontes en desuso y a la carretera que baja al
avituallamiento del Puerto que aunque me cuesta
la hago toda corriendo.
Me siento, bebo algo
de isotónico, llamo a meta avisando de que llegaré antes de lo previsto, guardo
los bastones y sin perder mas tiempo salgo para hacer los últimos 10
kilómetros.
Cruzo la carretera y
por un camino con ligera pendiente hacia arriba voy en busca de la algo
complicada bajada de La Barranca. Por este camino me encuentro con un corredor,
nos preguntamos que tal vamos y contestamos lo mismo…, bien pero no estamos
para mucha cuesta arriba. Me paro a hacer unas fotos aprovechando las bonitas
vistas y que aún es de día (el año pasado aquí tuve que ponerme ya el frontal)
y sigo mi camino andando ya que me sigue costando correr.
Que vistas mas bonitas! y el Puerto de Navacerra al fondo. |
También son bonitas. |
Estoy en la última
bajada de la carrera con una primera parte
algo complicada por las piedras, tierra y raíces. Me dejo caer e intento
correr con cuidado, mi cuerpo se queja pero poco a poco noto como voy
recuperando las fuerzas. Estoy seguro de que mi tiempo en meta va a ser mejor
del esperado y de que voy a poder entrar en meta con mi pequeña Claudia, esto
me motiva bastante y según sigo bajando todos los dolores van desapareciendo.
Mi ritmo empieza a ser muy bueno, adelanto al chaval de antes y comienzo a
adelantar a mas corredores que bajan caminando tranquilos. La bajada va
haciendo zig-zags y casi voy derrapando en las curvas.
Me han entrado las
prisas por llegar, aumento algo el ritmo aprovechando que el terreno mejora
bastante y sigo adelantando a corredores con cuenta gotas hasta que por fin
llego a una ancha pista y después a una carretera donde está el último control.
Me informan de que quedan 4,5 km., a meta, llamo avisando de que en 20’ estoy
allí y sigo corriendo ahora por otro ancho camino de tierra.
Un corredor andaluz
al que adelanto me pregunta si vamos los últimos, sorprendido le digo que no
puede ser, que llevo sobre 1h 40’ de mejoría con respecto al año anterior y en
la clasificación quedé un poco por encima de la mitad, o sea que no podemos ir
los últimos, pero me comenta que este año parece ser que ha habido muchos
descalificados en la Morcuera debido a los tiempos de corte y abandonos. No se,
le digo y dándole ánimos sigo mi camino, escuchándole decirme ¡!Venga a por las
2 horas que lo tienes ahí¡¡.
Voy disfrutando de
las vistas que no pude ver el año anterior por llegar de noche. Al fondo veo el
embalse de Navacerrada ya muy cerquita y algunos tejados de casas. Llevo el
frontal puesto pero sin encender ya que sigue habiendo mucha claridad. Dejo
este camino de tierra y comienzo a transitar por una carretera con una parte
final en subida que hago también corriendo. Los corredores a los que adelanto
me animan haciendo yo lo mismo. Esa carretera me lleva a una rotonda que cruzo
y entro ya en las calles de Navacerrada. La gente con la que me encuentro me
aplaude, anima e indica el recorrido aunque está muy bien marcado.
Voy pensando en mi
niña.
Subo por una calle
con mucha gente sentada en terrazas que aplauden al verme pasar, ya estoy casi
llegando.
Veo la zona de meta, Jorge está allí y me
saluda (llegó 36’ antes que yo), mas adelante está Claudia esperándome en la
alfombra que lleva a meta (luego me enteré que no quiso cenar hasta que yo llegara). Me paro y la doy un beso. La cojo de la mano y
pregunto si quiere entrar andando o corriendo…, corriendo papa !! . Me pregunta
si viene alguien detrás de mi, le digo que no (entendiendo que se refiere a
alguien que pueda molestarnos para la foto de la llegada) y me responde…,
entonces vas el último ??., no no hija tranquila no voy el último y alzando las
manos entramos en meta.
La mejor y mas bonita llegada de todas. |
Objetivos cumplidos. |
22h47’46’’. Contento
con la mejora de casi 2 horas y con lo mejor de la carrera, mi bonita entrada
en meta.
Un placer Jorge compartir esos kilómetros juntos. Nos vemos pronto y seguro que te irá muy bien el UTMB.
No hay comentarios:
Publicar un comentario